“Hemos despertado al león” fue lo que expresó al Almirante Isoruko Yamamoto cuando se concretó el ataque a Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941.
De oficial joven salvó de quedar inválido, al evitar que le corten un brazo de heridas de guerra, donde el pronóstico era 50/50.
Vivió en USA, 10 años primero como estudiante de Harvard y luego como agregado militar, recorriendo todo el país; lo cual le permitió conocer el potencial industrial, siendo promotor de la modernidad de la marina del Sol Naciente.
Se opuso al Pacto Tripartito, al Eje (Berlín, Roma, Tokio) lo cual duró un año, hasta que se firmó en setiembre de 1940.
Sabiendo que la guerra era inminente con USA, planificó un plan certero que lo inmovilizara y que permitiera el dominio de Japón de todo el Océano Pacífico.
Su objetivo principal eran los 4 portaaviones norteamericanos anclados en Pearl Harbor, en las islas Hawái en el medio del Pacífico.
Portaaviones que convenientemente fueron enviados a “unas prácticas” una semana antes, su agente del casino de oficiales no llegó a concretar su informe.
Más adelante para acabar con los citados portaaviones, planifica el encuentro en la isla de Midway, mas lo que no sabía era que los norteamericanos ya habían descifrado los códigos de sus comunicaciones, con lo cual estaban expuestos, y en lugar de hundir los 4 portaaviones USA, le hunden 4 portaaviones japoneses, lo cual cambia el curso de la guerra.
Logra en plena guerra una evacuación exitosa de tropas Japonesas, en diversas islas, una especie de Dunkerque.
Habilita en diversas islas aeropuertos, para hacer diversos ataques a la flota americana. Visita como Jefe de la Armada Imperial Japonesa las diversas bases creadas. La Marina en 1943 había cambiado sus códigos, mas en febrero de dicho año, se capturó un submarino japonés, donde no pudieron destruir los manuales del nuevo código, con lo cual nuevamente tenían acceso los americanos a sus comunicaciones.
Lo cual les permitió saber que, Yamamoto el 18 de abril de 1943 inspeccionaría las bases japonesas en las Islas Salomón. El plan del magnicidio llamado “Operación Venganza” fue aprobado por el mismo presidente Roosevelt.
Ese día, 16 cazas norteamericanas abatieron el avión de transporte del Almirante Yamamoto, que iba escoltado por 6 cazas Zero.