Douglas Mac Arthur el soldado más antiguo del mundo, 61 años de servicio.
En la invasión a México logra una hazaña al ubicar locomotoras para movilizar tropas. Otro oficial también destacaría, George S. Patton.
Se vuelven a encontrar en la Primera Guerra Mundial, justamente en la línea del frente, ambos están de observadores, ninguno de ellos quiso regresar a la trinchera, mientras silbaban las balas alrededor, hasta que ambos lo hicieron al mismo tiempo.
En la década del 30, es enviado a las Filipinas para organizar el ejército filipino. Tuvo de asistente a quien sería el general Eisenhower y llegaría a presidente, del cual comentó: “Es un buen administrativo” (oficinista).
El domingo 7 de diciembre de 1941, -de ahí viene lo del domingo 7-, los japoneses atacan Pearl Harbor, la base americana en Hawái. Mac Arthur subestima a los nipones, quienes el lunes 8 de diciembre al medio día atacan la base Clark en las Filipinas, al igual que Hawái y para evitar a los saboteadores, las aeronaves estaban agrupadas en un solo lugar y en línea. Los nipones destrozan toda la fuerza área americana.
Un error, una negligencia que le pudo costar el puesto, mas el presidente Roosevelt considera que ya se tenía bastante con el ataque a Pearl Harbor, para destituir a un general famoso.
Mac Arthur se retira a Batan y Corregidor, donde hace la resistencia a la invasión a las Filipinas. Cuando era inminente la toma por el Imperio del Sol Naciente, Roosevelt le ordena retirarse, no quería que un general americano sea tomado prisionero.
Ahí el general de los lentes oscuros hace celebre su frase: “Volveremos”.
Terminada la guerra en 1945, es nombrado Gobernador Militar de Japón, supo conducir como un nuevo Shogun el nuevo Japón.
En 1950 Corea del Norte invade Corea del Sur, Mac Arthur es nombrado comandante de las fuerzas de las Naciones Unidas.
Ahí es donde participa el Batallón Colombia mas eso…es otra historia.
Siendo un estratega, realiza el desembarco en Inchon, partiendo en dos al ejército invasor, acabándolos en el Sur y pasando a la ofensiva, pasa la frontera delimitada por el paralelo 38, pensando en unificar las dos Coreas, se aproxima al río Yalu, donde está la frontera con China. Promete a los soldados: “Para Navidad estarán en casa comiendo pavo”.
Subestimo a los chinos, su líder Mao Tse Tung y los comunistas no iban a permitir tener una frontera con los americanos, así que intervienen en la guerra con un millón de “voluntarios chinos”.
Mac Arthur pide el uso de armas nucleares para detener a tamaño ejército y empieza a dar conferencias de prensa.
El presidente Harry S. Truman le indica que se mantenga en reserva. El general sabía mandar, mas no sabía obedecer.
Se encuentran, Truman lo condecora mas al poco tiempo Mac Arthur insiste en atacar China en varios frentes.
Se demuestra lo que es una democracia, el poder civil sobre el militar. El presidente Truman destituye al general Mac Arthur.
Mac Arthur es recibido apoteósicamente a su regreso, algunos consideran que puede ser el próximo presidente de Norteamérica.
Ante el Congreso da su discurso de despedida, la parte final es el deseo de todo veterano:
“Ahora después de haber servido a mi país más de 40 años, me retiro, me retiro como un viejo soldado, y los viejos soldados no mueren, solo se desvanecen”.