“Sí mil vidas tuviera, gustosas las daría por mi Patria”.
Pescador peruano José Olaya antes de ser fusilado.
Corría el año 1820 y la ola libertadora llegaba al Perú así que el humilde pescador chorrillano Olaya se ofreció de voluntario para ser mensajero de los patriotas.
En 1823 los realistas habían tomado la Capital (Lima) y los patriotas estaban en los Castillos del Callao por lo que para evitar la ruta terrestre a nado desde el puerto del Callao hasta la caleta de Chorrillos, llevaba los mensajes Olaya.
Hasta que el 27 de junio de 1823 lo descubren y lo someten a diversas torturas para que delate a los patriotas a quienes llevaba los mensajes. Le dan de palos, luego le arrancan las uñas para después colgarlo de los pulgares mas guardo silenció.
El 29 de junio lo llevan a fusilar donde exclama sus palabras para la posteridad. En la actualidad a un costado de la Plaza Mayor de Lima, donde fue fusilado existe el Pasaje Olaya con su monumento.
Durante la Segunda Guerra Mundial destaco un alemán para los trabajos mas riesgosos, para las misiones imposibles, su temple de acero le ayudo, tenia de seunonimó: El Aguila.
Su gorra tipo finlandesa lo destacaba, En 1945 con los rusos a las puertas de Berlín, simplemente desapareció, nunca mas se supo de él.
Es la regla de oro que te enseñan los Veteranos cuando entras a ese mundo de acción y sombras. Tu ruta de escape, no lo olvides.
El Abuelo Europeo adivinaba la acción por venir así que de joven oficial me aconsejaba:
Cuando te toque trabajos duros, haslo en silencio y regresa en silencio.
Solo cuéntamelo a mí.
Un Secreto de dos solo lo sabe Dios, un secreto de tres ya no lo es.
Para pertenecer a un G.I. (Grupo de Infiltración), los Topos también los llaman, debes tener ciertas cualidades, tu no escoges, la Institución te escoge.
Durante la Guerra Interna que tuvo el Perú, se hacía necesario infiltrar al enemigo, que estaba organizado en células, era una pirámide su mando por lo que se hacía difícil descubrir sus mandos así que se tenia que hacer una labor lenta y segura.
4 oficiales fueron seleccionados, al final se decidió por uno de los 4 al indicar que era el único soltero.
Su labor fue denodada, lamentablemente termino su accionar bajo un fuego amigo.
Cuando nos enviaron a Tierras del Norte, no entendía porque los civiles llamaban double dog a los Soldados que hacían su servicio. Dada que su paga era poca y podían ganar mucho mas como civil.
No entendían que servir a la Patria no tiene precio, que son Valores lo que lleva hacerlo. Como la moral en un Ejército.
Durante la presidencia de Jimmy Carter se dio la crisis de los rehenes en la Embajada de Teheran, Iran, 1979.
Así que se busco soldados superpatriotas para una Misión de Alto Riesgo, nombre de la Operación Eagle Clow (Garra de Aguila)
Día señalado el 24 de abril de 1980, el éxito de la misma hubiera significado la reelección de Carter como Presidente.
En Teherán ya se había instalado un grupo de apoyo para la unidad americana que llegaría. Lo que llamamos los scouts, los guías.
Podéis creer que a la fecha con toda la tecnología y satélites que se cuentan, se usan Marcadores (comandos en el sitio) para que se de 100% al objetivo.
Lo que no previeron en la operación son los vientos del desierto, cuya arena fina penetra a los motores, mas que vientos tormentas, lo cual produjo que un helicóptero con un avión colisionase, terminando la misión.
De no haber sucedido el acotado impase, se tenia a favor la poca capacidad de reacción de la cadena de mando iraní. Lo cual es frecuente cuando concluye una Revolución, hay tantos jefes que para una orden esta se diluye o no es inmediata.
La Unidad hubiera llegado por sorpresa donde estaban los estudiantes iranies, primero hubieran usados gases paralizantes (años después los rusos lo aplicaron en el rescate en un Teatro) y luego granadas de distracción, que hacen ruido y producen luces desconcentrando a quienes se les va atacar.
De ahí sacar a los 56 rehenes para un sitio seguro determinado donde los helicópteros los llevarían a un punto del desierto donde Aviones los transportarían.
Previo al ataque, se haría un ataque de distracción que produciría un enorme incendio en la ciudad para desorientar al enemigo.
El fracaso de la operación en Irán produjo una reorganización de mandos y planeamientos.